El camino del éxito

El Camino del éxito.
Estilo Sevilla.
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Si alguna mañana te has despertado con la certeza de que lo que hoy eres no te conducirá a lo que deseas ser mañana, de que la vida que llevas no es más que un acostarte por la noche sin haber aprendido nada. Si tienes la seguridad de que tu vida es la misma y miras hacia atrás y encuentras los mismos miedos y a la misma persona que hoy eres , posiblemente te hayas equivocado, hayas desperdiciado el tiempo y algo se te ha pasado por el camino.
No permitas que tus sueños no te dejen despertar.
Abre los ojos y lucha, el éxito y la felicidad no son una meta sino un camino. Y cuando lleves mucho tiempo tras su búsqueda, y creas haberlos conseguido, te darás cuenta que nada volverá a hacerte tan feliz en tu vida, como te hizo ese camino.
Me acuerdo de quien, en una mesita de noche, con la tenue luz de un quinqué, cada noche después del trabajo, se sacó la carrera mientras sus hijos dormían; del que trabajó hasta el día de nochebuena picando puerta, a ver si ganaba para comprar un árbol y los Reyes de sus niños, o la que cogió una muda de sus hijos y se los llevo lejos, lejos de esa vida!, en la oscuridad si, pero libres! Todos ellos hoy, se sienten orgullosos de su esfuerzo, y cada día fue un paso más hacia la luz, y recuerdan, quien no, cuando las cosas no iban bien pero disfrutaron huyendo , cada día más lejos de la herrumbre y más cerca la felicidad.

A ti, que no sabías cuántos besos cabían en tu boca hasta que dejaste el infierno en el que te hacían vivir, o a ti, que no perdiste la esperanza de encontrar un empleo, de ascender en él. Y a ti, que cada noche antes de acostarte te preguntas si eres o no el mejor papá del mundo, no dejéis de luchar … porque el éxito y la felicidad son árboles que de vez en cuando se pelan y se quedan en el esqueleto, como la suerte caduca para los que creen que lo bueno o lo malo es para siempre.

Aparta de tu vida todo aquello que no te conviene, esa gente que te roba la energía y con quien tomar un café tendría que estar prohibido para la salud pública. No confundas el amor con el miedo, ni el miedo con el respeto.
Suma, cada día un poco y no desfallezcas, cuando creas que está todo por conseguir, cuando pienses que queda mucho camino todavía por recorrer, cuando seas consciente de que sabes cada día menos de la vida, estarás en la senda.
Enseñale a los pequeños de la casa a disfrutar de la vida, a pasar una tarde en el parque con un bocata y una bolsa de pipas, un columpio, un libro, o un amigo. Y cuando no sepas si haces lo correcto, piensa simplemente en ellos. Yo tengo una táctica muy sencilla. No hago nada por lo que mi hijo se avergüence de su padre. Antes de tomar un camino me digo: ¿estaría Pepe orgulloso de lo que voy a hacer?

Piensa en positivo, abandona la palabra crisis y sustituyela por “cambio”. Intenta durante un tiempo ver el lado bueno de las cosas, no ganas nada con lo contrario. Cambia! El sillón y el mando del televisor por algo que de verdad te llene, por algo que siempre te haya gustado, algo para lo que creas que ya no estás preparado. Márcate una meta y desempolva ese viejo cajón de pinturas y pinceles, o esa guitarra que más que guardada está escondida.

Y disfruta, dale un sentido a tu vida, la motivación evita el abandono premeditado de toda la voluntad que te pueda ir quedando en tu interior. Un día será una excusa, otro día te darás una semana, a la semana descubrirás el sofá y la autocomplacencia y cuando menos te lo esperes alguien te preguntará: ¿qué leches estás haciendo con tu vida?

Decide por ti misma, no dejemos que las leyes alumbren nuestro cuerpo sino queremos que la justicia se apague en este mundo. Que no te roben la voluntad de decidir qué tipo de mujer quieres ser el día de mañana, a qué dedicar tu vida y en qué condiciones. Me recuerda todo esto a algo que nos parecía muy lejano cuando el gobierno de Fujimori, aprobó un plan de esterilización forzada contra las mujeres indígenas, para frenar la natalidad en los sectores pobres de la sociedad peruana. Como quien tiene una granja y decide que ahora quiere explotar cerdos y no gallinas.

Santos Garrido López